¿Cómo
quieres llegar a los 80 años?
Rubio-García
CG1,
Rojas-Pérez A1,
Rosiles-Abonce DMC1,
Rivera-Chávez MJ2,
Urzúa-González AR2.
1. Estudiantes
de la licenciatura en Médico Cirujano, 6to semestre, Departamento
de Medicina y Nutrición, División de Ciencias de la Salud,
Universidad de Guanajuato, México.
2. Coordinadores
del Módulo de Medicina Interna de Fase 2, de la licenciatura en
Médico Cirujano, Departamento de Medicina y Nutrición, División
de Ciencias de la Salud, Universidad de Guanajuato, México.
Resumen.
La enfermedad
arterial periférica es una de las afecciones más comunes en la
actualidad, debido a malos hábitos, tales como:
Sedentarismo, alimentación rica en carbohidratos, grasas y consumo
de tabaco. Todo esto conlleva a una mayor susceptibilidad de padecer
enfermedades crónicas como: diabetes, obesidad,
hipertensión
y aterosclerosis. Se
manifiesta con daño en las
arterias, causado
por acumulación de placas de
colesterol en la pared de las arterias, afectando
la circulación de todo el cuerpo. Es más común que se presente en
personas mayores de 60 años. La
aterosclerosis es la principal causa de enfermedad arterial
periférica, la
cual suele manifestarse con
la disminución
de la circulación sanguínea, provocando daño celular por falta de
oxígeno y nutrientes
(isquemia
aguda), llevando a la amputación del miembro afectado. En la
actualidad se han logrado avances en el tratamiento de esta
enfermedad, los cuales buscan que el paciente no pierda el miembro
afectado y se reviertan
los daños. Se están realizando investigaciones sobre tratamiento
con genoterapia mas individualizada,
asimismo, se
está buscando innovar los procedimientos quirúrgicos de
intervención periférica, con tecnología que provoque
menos efectos
adversos.
Palabras clave:
aterosclerosis, colesterol, enfermedad arterial periférica, isquemia
aguda, intervención periférica.
Abstract
Peripheral arterial
disease is one of the most common conditions today, due to bad habits
such as: sedentary lifestyle, high carbohydrate diet, fat, and
tobacco consumption. All this leads to a greater susceptibility to
suffer from chronic diseases such as diabetes, obesity, hypertension
and atherosclerosis. It manifests with damage to the arteries, caused
by the accumulation of cholesterol plaques in the wall of the
arteries. Affecting the circulation of the entire body. It is more
common to occur in people older than 60 years. Atherosclerosis is the
main cause of peripheral arterial disease, which usually manifests
itself with the reduction of blood circulation, causing cellular
damage due to lack of oxygen and nutrients (acute ischemia), leading
to amputation of the affected limb. At present, advances have been
made in the treatment of this disease, which seek that the patient
does not lose the affected member and the damage is reversed.
Research is being carried out on treatment with more individualized
genotyping, and it is also looking to innovate the surgical
procedures of peripheral intervention, with technology that causes
less adverse effects.
Key words:
atherosclerosis, cholesterol, peripheral arterial disease, acute
ischemia, peripheral intervention.
Resumo
A doença arterial
periférica é uma das condições mais comuns hoje em dia, por causa
de maus hábitos, como sedentarismo, dieta rica em hidratos de
carbono, gorduras, consumo de rapé. Tudo isto conduz a um aumento da
susceptibilidade a doenças crónicas, tais como diabetes, obesidade,
hipertensão arterial e aterosclerose. Manifesta-se a danos nas
artérias causadas por formação de placas de colesterol nas paredes
das artérias. Afetando a circulação de todo o corpo. Mais
comumente ocorre em pessoas com mais de 60 anos. A aterosclerose é a
principal causa de doença arterial periférica, que normalmente se
manifesta com a diminuição do fluxo sanguíneo, causando danos
celulares por falta de oxigénio e nutrientes (isquemia aguda),
levando à amputação do membro afectado. Neste momento tem havido
progressos no tratamento desta doença, que procuram o paciente não
perde o membro e danos afetada estão invertidos. Eles estão
realizando pesquisas sobre o tratamento mais individualizado com
terapia genética também estão olhando para procedimentos
cirúrgicos inovadores de tecnologia intervenção periférica que
provoca menos efeitos colaterais.
Palavras-chave:
aterosclerose, colesterol, doença arterial periférica, isquemia
aguda, intervenção periférica.
Introducción
La acumulación de
colesterol en las paredes de las arterias, mejor conocida como
aterosclerosis, es una de las enfermedades con mayor incidencia a
nivel mundial, debido a los malos hábitos que nuestra sociedad ha
incorporado en su vida diaria; como el sedentarismo y la mala
alimentación. La aterosclerosis es de las principales causas de
muerte en el mundo, por el incremento de factores de riesgo, algunos
que no se pueden cambiar, como la edad y el sexo, y otros que se
pueden evitar o controlar; como el colesterol en sangre, niveles de
azúcar, presión arterial, alimentación y actividad física.
Hablando del número
de casos en nuestro país, según el INEGI, la aterosclerosis
representa la primera causa de muerte en México; tan solo en 2015
hubo 88,114 muertes, estando en segundo lugar la diabetes mellitus y
en tercer lugar, las enfermedades del hígado. En cuanto al resto del
mundo, según la organización mundial de la salud (OMS), en 2012 fue
la segunda causa de muerte.
Además, este
padecimiento puede traer consigo consecuencias incapacitantes o
fatales; tal es el caso de un daño cerebral causada por un infarto,
la amputación de algún miembro o pérdida de la función de algún
órgano importante, como los riñones o el corazón, debido a la
falta de oxigenación y nutrición al tejido.
Aunque los
tratamientos han tenido avances impresionantes, aún pueden
representar un riesgo para la vida, por lo que es importante conocer
más sobre esta enfermedad y todos los tratamientos y hábitos, que
puedan llevar a la salud óptima y con ello, una mejor calidad de
vida.
Colesterol en circulación sanguínea
Los
niveles altos de grasa y azúcar en sangre, por tiempo prolongado,
conducen a una dislipidemia (altos niveles de colesterol en sangre).
Existen muchos tipos de colesterol, entre estos se encuentra el HDL
(por sus siglas en inglés, High
Density Lipoprotein) conocido
como colesterol bueno, y el LDL (por sus siglas en inglés, Low
Density Lipoprotein)
conocido como colesterol malo.
El colesterol bueno se encarga de retirar todo el colesterol malo que
se acumula en las arterias y venas.
Pero cuando hay un consumo muy
alto de grasa, el colesterol malo aumenta y se acumula en las
arterias, formando una placa de ateroma (lesión en las arterias por
exceso de LDL). Esta placa con el paso del tiempo, crece de manera
importante en todas las arterias si no se detiene el consumo de
grasas, llegando a obstruir arterias importantes, como las del
corazón, cerebro y miembros periféricos. Cabe mencionar, que este
proceso también puede ocurrir en personas delgadas, ya que la
genética y raza, son factores que influyen en una mayor
susceptibilidad para padecer esta enfermedad, por eso la Asociación
Americana del Corazón (AHA,
por sus siglas en ingles, American
Heart Association) recomienda
medir los niveles de colesterol en toda la población mayor de 20
años.
La
manifestación principal de la dislipidemia es la aterosclerosis,
siendo la principal causa de enfermedad arterial periférica y
enfermedad coronaria (afección de las arterias del corazón por una
placa de colesterol).
¿Y
cómo es que se manifiesta la enfermedad arterial periférica?
Esta
es una enfermedad silenciosa, ya que por lo general es asintomática,
y es evidente cuando la obstrucción en las arterias causa una
disminución de la circulación. La enfermedad arterial periférica
se manifiesta con los siguientes síntomas:
- Dolor en piernas al caminar distancias cortar (claudicación intermitente)
- Disminución del volumen del miembro afectado.
- Las extremidades pueden presentar disminución de la temperatura, palidez y pérdida de pulsos.
- Falta de vello de las extremidades y uñas quebradizas.
- Úlceras en miembros inferiores.
La isquemia aguda es el estadio final de la
enfermedad, la cual, si no se detiene llega a la amputación del
miembro afectado. Hoy en día se investigan nuevos tratamientos que
detengan la progresión de la enfermedad y mejoren la claudicación
en pacientes afectados (Anexo 1).
Anexo 1. Clasificación de Fontaine para Enfermedad Arterial Periférica |
¿Qué es la
intervención periférica?
Es un tratamiento
terapéutico para la enfermedad arterial periférica, siendo un
procedimiento poco invasivo, donde el médico accede directamente a
la arteria afectada, ya sea por una placa de colesterol que está
obstruyendo el flujo sanguíneo o por un trombo (coágulo de sangre
que se forma en el interior de un vaso sanguíneo).
Este tratamiento
suele ser delicado y los médicos deben valorar muy bien al paciente,
antes de decidir llevar a cabo dicho procedimiento.
Historia de la
intervención periférica
Hay distintos tipos
de intervención periférica actualmente, acorde al padecimiento que
presente el paciente. Estos procedimientos han tenido una historia
relativamente larga, ya que a principios de siglo, ya se empezaban a
diseñar tratamientos para desobstruir arterias enfermas. Las fechas
importantes en estos procedimientos son las siguientes (Anexo 2).
Anexo 2. Historia de la Intervención en Enfermedad Arterial |
La intervención
periférica ¿Hacia dónde nos lleva?
Fue a inicios de
1960, cuando comenzaron a crearse nuevas alternativas, menos
invasivas, para tratar a pacientes con enfermedad arterial
periférica. Esto hizo pensar a muchos: “ En verdad, reducirán las
imputaciones y muertes de manera significativa”. En esa época, se
buscaba desesperadamente contar con alternativas que garantizaran una
mejor calidad de vida.
Por lo tanto, muchos
hospitales alrededor del mundo comenzaron a poner en práctica estas
nuevas técnicas de mínima invasión.
La intervención
periférica más importante y comúnmente realizada es la
angioplastía. Fue en 1964, cuando el radiólogo estadounidense, de
origen alemán, Charles Dotter y Melvin Hopkins, realizaron por
primera vez en la historia, esta técnica. El procedimiento consistía
en introducir un catéter en los vasos afectados y así restablecer
la circulación arterial.
La cirugía fue todo
un éxito y desde entonces se ha convertido como la primera opción
de tratamiento en pacientes con enfermedad arterial periférica.
Un gran milagro
La evolución
tecnológica, ha permitido un avance exponencial en la aplicación de
materiales, en especial, aquellos comúnmente utilizados en medicina.
Un claro ejemplo, es
la endoprótesis vascular. Consiste en un injerto hecho de poliéster
artificial. Su función es reemplazar tejidos del cuerpo humano o
reparar vasos sanguíneos afectados. Este injerto causa pocas
reacciones, no contiene químicos y es muy tolerable; es considerado
una de las alternativas más eficaces en el mundo del
intervencionismo periférico.
Qué podemos
esperar en un futuro
En el terreno de la
ciencia, los avances tecnológicos son sorprendentes. Aún quedan
retos por resolver, cómo mejorar el éxito del tratamiento, reducir
costos y aumentar su seguridad a largo plazo.
Si bien, el ocaso de
la angioplastía e injertos sucederá cuando la terapia génica logre
ser la mejor opción para atacar a la ateroesclerosis y trombosis.
Mientras tanto, nuestro futuro será inmortalizado como una de las
mejores épocas de la intervención periférica.
Creando nuevos
vasos
Actualmente se están
probando nuevos tratamientos basados en la genoterapia, la cual
consiste en utilizar proteínas recombinantes (se obtienen al
expresar un gen clonado) y células madres (células que se
encuentran en todos los organismos, las cuales tienen la capacidad de
dividirse y diferenciarse en diversos tipos de células
especializadas). Con estas terapias se promueven procesos de
crecimiento vascular, disminuyendo el riesgo de amputación. Se han
probado con vías de administración intraarterial e intramuscular en
la extremidad afectada. Sin embargo, en los ensayos realizados, no se
ha encontrado beneficios en la reducción de la isquemia.
¿Cómo se crean
nuevos vasos?
Para crear nueva
circulación sanguínea, es necesario introducir en las células, una
señal; con el fin de crear nuevos vasos, esta señal será
introducida por una secuencia genética, de un vector viral
(adenovirus o retrovirus). Es importante resaltar, que hasta la
fecha, este tipo de terapias no son utilizadas en pacientes, ya que,
el hecho de introducir un vector que altere el ADN (Ácido
Desoxirribonulceico), podría provocar el crecimiento de líneas
celulares tumorales; asimismo, se debe observar si las nuevas
arterias formadas son funcionales, y llevan a cabo la función de
nutrir y oxigenar el miembro afectado. Por ello, se busca que la
terapia sea dirigida a la línea celular encargada de la angiogenésis
(formación de vasos sanguíneos a partir de ya existentes), y así
promover la vasculogenésis (formación de vasos sanguíneos por
primera vez a partir de células epiteliales).
Cabe señalar que todas estas terapias son muy prometedoras, pero aún
se encuentran en investigación.
Más vale prevenir
que lamentar
Si bien los avances
son sorprendentes, seguramente ninguno de nosotros desearía
someterse a este tipo de procedimientos. Por ello, la mejor forma de
prevenir estos escenarios es: Cuidar tu alimentación, hacer
ejercicio y no fumar; en pocas palabras ¡cuidarte! Con el fin de
prevenir la aparición de enfermedades crónicas, como diabetes e
hipertensión. Y muy importante, si ya eres hipertenso o diabético,
debes mantener tus niveles de presión arterial y glucosa en rangos
normales.
Conclusión
Todos estos nuevos
procedimientos son muy novedosos para tratar a la enfermedad arterial
periférica y brindar al paciente una mejor calidad de vida, quizás
en unos años más se logre tener nanorobots, viajando por las
arterias dañadas y así evitar amputaciones de miembros inferiores;
del mismo modo se tendrá una terapia génica dedicada a producir
nuevas arterias que realicen las funciones adecuadas. Todos estos
avances tecnológicos, son útiles en las complicaciones más severas
de la enfermedad arterial periférica. En el caso de estadios menos
graves de la enfermedad, el mejor tratamiento es el cambio de estilo
de vida, para tener niveles adecuados de colesterol y evitar el daño
a sus arterias.
Si usted se encuentra
con factores de riesgo, es momento de actuar, de hacer ejercicio,
dejar de fumar, controlar su peso y presión arterial. La decisión
está es sus manos: ¡Decide cómo llegarás a los 80 años!
Bibliografía.
1.
Andrew H. Baker. (2017 May, 3). Cardiovascular Gene Therapy: Past,
Present, and Future. The American Society of Gene & Cell Therapy,
25, 1095-1106.
2.
American College of Cardiology Foundation . (November 2019).
Management of patients with Peripheal Artery Disease. American Heart
Association , 2, 1-66.
3.
René A Bourlon Cuéllar, Mariana López Nuche. (Diciembre 2010).
Aterosclerosis y lesión endotelial: ¿proceso irreversible?.
Medicina Interna de México, 26, 590-596.
4.
Josep Guindo, María Dolores Martínez-Ruiz, Gabriel Gusi, Jordi
Punti, Patricia Bermúdez y Antoni Martínez-Rubio. (2009). Métodos
diagnósticos de la enfermedad arterial periférica. Importancia del
índice tobillo-brazo como técnica de criba. Revista Española de
Cardiología, 9, 11-17.